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El programa formativo de Primeros Auxilios Para Niños (PAPI), de la Cruz Roja Andorrana ha permitido formar las técnicas básicas en primeros auxilios a 871 niños y niñas del Principado. Se realiza cada año en todos los centros educativos del país y está destinado a niños de 10 y 11 años. El programa se instauró en 2009 con el objetivo de lograr una población totalmente formada en primeros auxilios a 20 años vista. Cruz Roja Andorrana, más concretamente el Centro Nacional de Formación se marca el objetivo de lograr que la población esté más segura, concienciada y formada posible y de dar a las poblaciones más jóvenes, los conocimientos para salvar vidas y saber reaccionar ante una emergencia.
Con esta formación los alumnos del último ciclo de primaria, aprenden cómo reaccionar ante una situación de emergencia. Se les enseña cómo aplicar el procedimiento llamado PEAS, Proteger, Examinar, Alertar y Socorrer, y les permite adquirir confianza y tomar conciencia de la importancia que tienen en la cadena de socorro. Este hecho es importante, puesto que los niños están a menudo al principio de la gran mayoría de los accidentes que surgen en el ámbito domiciliario, y el tiempo que se gana con una actuación correcta en casos de emergencia es clave a la hora de salvar vidas.
El programa también busca que el 100% de los ciudadanos puedan ser capaces de prestar auxilios, puesto que se considera que a partir de los 10 años, cualquier persona con ganas de aprender, es apto y tiene las habilidades necesarias para intervenir. El bloque formativo desarrollado conjuntamente con Protecció Civil de Andorra se completa con un reciclaje de la temática que se hace en la secundaria, entre los 14 y los 16 años, de nuevo en todos los centros educativos. Esto se debe a que cada año existen evoluciones en las técnicas y es importante estar al día y sobre todo practicar.
Los cursos de primeros auxilios caducan de media a los cinco años y la formación se basa en la práctica. Desde Cruz Roja, los formadores destacan que con el camino de los años, los alumnos están cada vez más a la expectativa de realizar el PAPI. Existe una especie de transmisión entre ellos que hace que cada curso escolar, la venida de los formadores a las aulas es un momento muy esperado por los niños.
Este programa sigue siendo una realidad gracias a la colaboración de los diferentes centros educativos del Principado y del patrocinador del programa, Grup Heracles, que desde 2021 permite ofrecer esta formación a todos los niños del país.
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