Después de casi tres meses en el mar, los competidores de la regata Vendée Globe ahora se están acercando al punto de llegada en Francia, pero mientras estaban cerca de las traicioneras aguas infestadas de icebergs del Océano Austral, se mantuvieron relativamente seguros gracias a las observaciones satelitales. Leer: Los satélites de Copérnico vigilan los icebergs de Vendée Globe
Para garantizar su seguridad, CLS, una subsidiaria de la agencia espacial francesa CNES, y CNP utilizó información de satélites para detectar y monitorear icebergs. Esta información proviene de satélites que llevan altímetros, así como de los que llevan un radar de apertura sintética (SAR) como Copernicus Sentinel-1. Los satélites son la única forma de detectar y monitorear los icebergs de manera efectiva en los remotos océanos Australes.
Antes de que comenzara la regata, esta información satelital permitió a CLS establecer una zona de exclusión inicial alrededor de la Antártida para mantener a los marineros alejados de los icebergs. Sorprendentemente, actualizaron la zona no menos de cinco veces a medida que cambiaban las aguas heladas. Estas actualizaciones se proporcionaron a los organizadores de la regata Vendée Globe, que luego se las comunicaron a los patrones.
La imagen muestra las características principales de los cúmulos de icebergs detectados con altimetría (puntos de colores), el modo de onda Sentinel-1 (grandes copos de nieve cian) y las imágenes de radar de apertura sintética Sentinel-1 (pequeños copos de nieve azules). Estas detecciones se trazan en un mapa de temperatura de la superficie del mar. La imagen muestra el uso extensivo de Sentinel-1 (marcos negros) durante la Vendée Globe 2020-21, así como la versión final de la Zona de Exclusión Antártica (línea blanca).
Lea la historia completa: Copernicus Sentinel-1 guía a los marineros de Vendée Globe a la seguridad