«Hemos querido que los niños tengan un final de curso lo más normal posible», asegura María Teresa Casals, directora del departamento de la Escuela Andorrana. Con el alivio de las medidas sanitarias, se ha intentado buscar las alternativas más seguras para los jóvenes pero que estuvieran tan próximas como sea posible a la normalidad. Por este motivo se harán salidas, pero a destinos cercanos como dentro mismo de Andorra, Cataluña o Francia, y siempre validadas por Salud.
En este sentido, los estudiantes de segunda enseñanza tendrán actividades de día, «han sido mucho tiempo cerrados y tienen muchas ganas de salir». Una de las medidas que seHa seguido ha sido mantener las mismas burbujas que se mantenían dentro de las aulas, «No mezclaremos los cursos, como se ha hecho en otras ocasiones». Por otra parte, los de primera enseñanza se moverán principalmente por el país, haciendo salidas de día o haciendo alguna pernoctación a la Rabassa y diferentes emplazamientos. Todos ellos disfrutarán de estas actividades la próxima semana.
Otro tema que preocupaba y que, finalmente, se ha podido solucionar, han sido las graduaciones. Por un lado, los niños de sexto podrán asistir con dos miembros de su unidad de convivencia, Para que los puedan escoltar al evento. «Al final los más pequeños les cuesta más entender estas cosas, además los grupos son más reducidos y los protocolos de seguridad nos han permitido que los más pequeños puedan llevar hasta dos invitados», explicaba Casals.
Para los de segunda enseñanza y bachillerato, la única opción para poder hacerlo de forma segura ha sido retransmitir la graduación por ‘streaming‘. Los jóvenes tendrán un acto con todo lo que es común en este tipo de evento, como entrega de diplomas o discursos por parte del profesorado y los alumnos, pero sus familias no podrán asistir presencialmente. «Los grupos son mucho más grandes y no contábamos con espacios en los que pudiera acudir tanta gente, ha sido una lástima».