Historias personales del paro – À Punto


Alzira ofrece a parados formación para tener nuevas oportunidades
/ En el punto NTC

Uno de los perfiles más habituales de persona sin trabajo suele ser el de una mujer, mayor de 50 años y parada de larga duración. Es el caso de Mayar Mora, una vecina de Alzira de 62 años que lleva tres no encuentra trabajo. «Tengo cuatro hijos y uno de ellos todavía en casa. Mi hombre ha jubilado ahora, pero a mí todavía me queda para jubilarme y necesite también hacer jornales para el día de la jubilación «explica.

Mayar Mora, como muchas mujeres adultas mayores de 60, busca una oportunidad laboral y piensa que la experiencia es un punto a favor para personas como ella. «Las mujeres de nuestra edad tenemos experiencia en todo. Hemos educado hijos y hemos cuidado mayores, por eso tenemos mayor capacidad de adaptación, de entender las personas que los jóvenes aún no tienen. Yo creo que soy muy válida, tanto como una persona de 20 o 30 años «, cuenta Mayar.

Otro perfil muy habitual es el de los migrantes que llegan buscando nuevas oportunidades. Como Carmelo Montiel, vecino de Alzira, un argentino que llegó a España buscando un futuro mejor, pero la pandemia interrumpió su búsqueda de trabajo. «Tuve muy poco tiempo para encontrar trabajo, tal vez con la pandemia ya instalada fue más difícil. Yo tengo una carrera de ingeniería industrial, que estoy finalizando aquí. Me vendría bien conseguir trabajo a la restauración mientras termine la carrera universitaria «, ha explicado.

Según publica el Observatorio para el Empleo, en Alzira hay 4.000 personas sin trabajo y el 58% no tienen estudios. Es por ello que iniciativas municipales como el centro Idea de Alzira ofrecen a personas como Mayar y Carmelo la formación que necesitan para tener más posibilidades de volver al mercado laboral.



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