Es la primera misión de este tipo, establecida para monitorear nuestro Sol activo e impredecible y ayudar a protegernos de sus estallidos violentos, y tiene un nuevo nombre.
Alguna vez conocida como «Lagrange», la próxima misión meteorológica espacial de la ESA necesitaba un nuevo nombre que reflejara su función vital: ayudar a proteger la infraestructura, los satélites, los habitantes y los exploradores espaciales de la Tierra de eventos solares impredecibles pero violentos como las erupciones solares y las «eyecciones de masa coronal». .
Durante el Campaña #NombraLaMisiónSe enviaron 5422 entradas de toda Europa y, de hecho, de todo el mundo, y después de semanas de deliberación, innumerables hojas de cálculo, tres jueces diversos y expertos y un animado debate, se seleccionó un nuevo nombre para nuestra próxima misión de clima espacial: Vigilia de la ESA.
“Estamos encantados con el nuevo nombre de nuestra misión”, explica Juha-Pekka Luntama, Jefe de Meteorología Espacial de la ESA.
“Cuando lo escuché por primera vez, pensé que era perfecto. Eso es exactamente lo que hacemos, vigilamos y cuidamos la Tierra”.
En latín, ‘vigilis exceptus’ significa centinela o guardia, mientras que ‘vigilia’ significa vigilia y el acto de mantener una observación devota, lo que resuena con el papel de la misión: un guardián devoto, que vigila constantemente el Sol, para la Tierra.
Proteger la vida moderna y la vida misma
Las tormentas solares pueden dañar las redes eléctricas, interrumpir las telecomunicaciones y amenazar los satélites y los servicios vitales que brindan. Al mismo tiempo, a medida que lanzamos cada vez más satélites a la órbita, creamos cantidades cada vez mayores de desechos, lo que aumenta drásticamente los riesgos de colisión para las misiones actuales y futuras.
Estos satélites han cambiado nuestras vidas y ampliado nuestra perspectiva sobre la Tierra, pero ellos, y las tecnologías que hacen posible en las que se basa la modernidad, son vulnerables.
La protección de los activos espaciales está en el corazón de la ESA Visión para el futuro . Para ello, el nuevo ‘acelerador’ Protect propone el desarrollo de ‘control de tráfico aéreo para el espacio’, así como un sistema de alerta temprana que nos ayude a prepararnos para la peligrosa actividad solar.