MAQUIAVELO Y EL ROL POLÍTICO DEL PUEBLO Y LAS MASAS
ÍNDICE
CONTEXTO HISTÓRICO Y POLÍTICO
A Maquiavelo no se le puede entender al margen de su contexto histórico situado a finales del siglo XV y principios del siglo XVI en la ciudad de Florencia.
Durante esta época, Florencia acusa a las fuertes presiones de la república veneciana mientras que se encuentra bajo la violencia imperialista de Francia y España. Así pues, estas confrontaciones internas y externas que estaban destruyendo la política medieval, hacían de Italia un lugar político muy fragmentado y un estado inestable en la que Maquiavelo ve una fuente de inspiración en el contraste entre la belleza de las iglesias, plazas y espacios públicos de Florencia y la debilidad de sus instituciones políticas que casi no podían asegurar la protección al pueblo.
Al 1492, Maquiavelo se convierte en cabeza de la segunda cancillería de Florencia, que era una especie de cuerpo técnico que asesoraba y ayudaba al poder ejecutivo, y allí se dedicaba a redactar informes que aconsejaban en temas de materia política.
Este trabajo le permitió asistir a diversos sucesos y empieza a ver como un pequeño error puede ser fatal para el mantenimiento de la comunidad. Sin embargo, en 1512, se vetado de su cargo de la segunda cancillería con la llegada de los Medicis debido a una acusación hacia Maquiavelo de conspirar contra estos y entra en prisión.
Cuando sale, se retira a una granja y comienza a formarse a sí mismo en una educación humanística leyendo los clásicos con el fin de relacionarlos con el arte de gobernar para escribir sus obras entre las que se encuentran El príncipe, Discursos sobre la primera década de Tito Livio I El arte de la guerra.
Maquiavelo es por tanto, de los pesador políticos más importantes en una época como el Renacimiento que por sí sola ya destaca por sus avances culturales e intelectuales.
EL PENSAMIENTO maquiavélico
La ética-política
Maquiavelo, cuando publica el príncipe es acusado de dictador debido a su cuestionamiento de la idea de virtud, del modo en que los individuos deberían comportarse políticamente.
Esta teoría política en contra de la virtud que hace tambalear la moral vigente fue la que hizo que se le considerara un individuo que actúa sin escrúpulos para con el poder y se le atribuyó la tan conocida frase «el fin justifica los medios «que realmente nunca escribió. Maquiavelo decía que «un mal menor justifica un mal mayor», que un acto política inmoral está excusada si se hace con el fin de preservar la comunidad política. Con otras palabras: para obrar bien en política a veces debemos actuar mal.
«Jamás el que entienda de estas cosas le reprochará cualquier acción que emprenda, por extraordinaria que
sea, para organizar un reino o una república. Sucede que, aunque le acusan los hechos [ accusandolo il
fatto ], le excusan los resultados [ lo effetto lo scusi ], y cuando estos sean buenos, como en el caso de
Rómulo, siempre le excusarán” ( Discursos , libro I, capítulo IX) «. 1
Así pues, la idea detrás del cuestionamiento de la virtud es una escisión entre la política y la ética para unirlas debido a que, la concepción de la ética clásica -la que es propia del individuo- no es útil para el gobernante que vela por los intereses colectivos y que sabe que lo que es bueno para el individuo no siempre es bueno para la comunidad.
De este modo, «lo maquiavélico» sería una pregunta por el daño que la pretexto en aras de la preservación del pueblo y el gobernante y, la ética-política, una ética que busca el bien común y supremo, la conservación del pueblo, que no tiene una concepción comunitarista ni principios universal o imperativos categóricos y que conlleva una relación paradójica entre el bien y el mal.
Por este motivo, Maquiavelo, lejos de ser un dictador, se preocupa por el mantenimiento del bien colectivo, aunque no se pregunte por la integridad individual, porque ve en la comunidad la posibilidad de una vida libre debido al consentimiento de las normas, derechos y deberes por parte del pueblo.
1 Maquiavelo: “Libro I, capítulo IX” en Discursos sobre la primera década de Tito Livio, trad. de Ana
Martínez Arancón. Madrid: Alianza Editorial, 1987, pp 57
Da forma a una materia inerte. Es lo más parecido a la figura de un jefe. Mientras el zorro ve el mundo desde debajo, porque ve el peligro constante que amenaza al pueblo, el fundador mítico tiene la capacidad de ver la comunidad política desde arriba. Es capaz de introducir instituciones, orden y libertades. Garantiza la estabilidad.
Tiene también una función estratégica, pero su función principal es dar orden a una forma caòtieca y así hacerla duradera, actúa como artesano que modela un objeto. Esta labor solo puede ejercerla un solo hombre, porque es imposible poner de acuerdo a unos muchos.
La unidad política no se puede dar a partir de la suma de intereses particulares, las partes ayudan al mantenimiento del todo, pero sólo hay un todo, el príncipe.
el pueblo
Es el elemento social y político más importante. El príncipe no tiene nada de especial respecto a los demás miembros que conforman el pueblo. No hay ningún tipo de trascendencia, forma parte del pueblo, no es un mesías. El poder del príncipe no se jerárquico, su fuerza no es la imposición a un pueblo, su fuerza es la fuerza de la multitud. Él se confunde con el pueblo, se convierte en parte del pueblo.
El poder al no ser jerárquico se presenta de forma horizontal. Maquiavelo lo entiende en términos de guerra. Esta no es lo contrario a la paz, sino la manera de encuentro de los cuerpos de la comunidad política. Entiende así el conflicto como algo fecundo.
Dentro de todo estado encontramos dos fuerzas contrapuestas. Por una parte el pueblo que no quiere ser oprimido ni dominado por los grandes, y los grandes que por su parte sí quieren oprimir y dominar al pueblo. Toda forma de existencia humana parte de esta división originaria.
Toda filosofía política presupone una antropología. Para Maquiavelo no hay una fuente de estas fuerzas, es la relación esencial en la que se construye una comunidad política.
El príncipe existe gracias a la división de la comunidad política en dos porque si el príncipe debe alcanzar la unidad de la comunidad política, entonces esta sólo la podrá lograr poniendo en juego estos dos deseos que estarán eternamente enfrentados. Debe generar un poder imaginario en el que no se vea identificado con ninguno de los dos deseos, ya que si se une a los fuertes pierde poder por parte del pueblo, y si se une al pueblo confundiría la unidad en la totalidad del pueblo. Eliminaría a los grandes, el cual es imposible, se antipolítico.
El término pueblo tiene dos connotaciones, por una parte se llama pueblo en el sentido de Populus ̧ esto es, el conjunto de los ciudadanos; y por otra parte encontramos que se llama pueblo en el sentido de Plebe ̧ la parte débil, que no se ni noble ni aristocrática.
El príncipe debe poder mantener los dos deseos en la misma forma que los inscribe en una unidad común. Esto lo consigue mediante la creación de libertades que en las que el pueblo quedará identificado y las usará y mantendrá mediante la participación política. Se da así una unidad del pueblo, pero no busca un equilibrio. No es un término medio aristotélico.
El poder se crea por dos elementos que son la fuerza desnuda y un príncipe capaz de identificar una comunidad con estos dos humores. No hay ninguna vinculación de la teología o la naturaleza, el poder está vinculado a esta escisión.
Allí donde el pueblo se fuerte, el poder de los grandes puede ser contenido. Esto da como resultado unas leyes buenas. Las transformaciones legales sólo se explican como consecuencia de la empuje reivindicativa del pueblo.
El conflicto es una condición necesaria para tener una relación fecunda con la ley, que es el marco que regula el conflicto, y siempre está abierta al cambio. La fuente de la autoridad de un dictador le viene de la anulación del conflicto
No es posible conservar una comunidad política sin querer conquistar nuevos horizontes, así el cambio se presenta de una forma más natural que el equilibrio. La república es mejor que la dictadura que se presta al nacimiento. Para buscar la estabilidad es necesario buscar la inestabilidad.
En una sociedad corrompida los comportamientos de los individuos de la comunidad están destinados a un interés personal, probado, no son seguidores del bien común. El resultado es la destrucción de la comunidad política que es la condición necesaria poer llevar a cabo los intereses individuales. Asegura un marco en el que los intereses tienen cabida, por eso la comunidad no es un fin en sí mismo ,.
Aquí entra la pregunta sobre qué marco institucional garantiza un comportamiento virtuoso. Por eso tenemos que partir del concepto de necesidad: los hombres siempre harán el mal a menos que se vean obligados a otra cosa por necesidad. Sólo la necesidad hará a los ciudadanos ciudadanos virtuosos.
Las instituciones y las leyes que canalizan el conflicto sin caer en el fraccionalismo